miércoles, 1 de septiembre de 2010

Cartas de amor de una presa musa en el vacio de un alma marchita.


En cuantas ocasiones nos hemos enamorado sin saber cómo, ni cuándo? Todos en algún momento hemos sacudimos un sentimiento de nuestro interior entre lagrimas, muchos hemos amamos sin ser amado y nos arrugamos en el desliz sentimental de un artificio en el que somos y no somos nada, algunos nos hemos enamoramos del viento fugaz que brota en la ventana o en el estancado detrás de una pantalla lleno de sombras marchitas confiando solo en los ojos abierto del alma, en las palpitaciones ardientes de deseo y en el sentimiento brotante de ausencia.. Cuántas veces hemos sufrido por amor y cuantas no? el resultado jamás competirá y curiosamente en momentos solitarios y vacio casi siempre recordamos la desdicha de amores pasados o perdidos, pero… si más adelante nos cruzamos de nuevo por el amor comprenderemos que hemos crecido. Quien no sufre es porque nunca ha amado y quien no ha amado es porque no ha nacido aun.

He aquí cinco cartas de amor en el que el sufrimiento se asoma arrancado pedazos de incompleta esencia. La distancia nunca fue fácil para atar dos pasiones pero al final … el final se los dejo a su imaginación.

Día 01

Es tan sublime la manera como cae la lluvia desde estas ventanillas, siento que iré a verte, que estarás allá y que una audaz apretón tocara mis sentidos, pero ay! eso no es real y no puedo sobrepasar los limites de nuestra presencias imaginaria, donde estarás? Que harás en este momento donde yo me alejo un poco más? Porque lamentablemente ya no son -- horas que dividen nuestros rasgos, en términos físicos me alejo un kilometro por 1,33 minutos a una velocidad de 80m/seg2.

Cuando observo estas gotas sujetadas al otro lado de mi cristal haciéndose caer a su destinario las asemejo a las que se deslizan por mis mejillas agudas y sencillas. Como quisiera verte mas allá de un sueño sacudido de esos que no van quedado olvidadizos en el regazo de mi memoria, a veces creo escuchar tu voz y he pensado tantas veces en responderte pero prefiero silenciar y percibir imaginando que un rayito está tocando mi alma y que viene de lejos, muy lejos pero no tiene distancia porque se trata de ti.


Día 02

Cuantas ganas tengo de escribirte, con ganas y sin inspiración en mis letras, tal vez solo quisiera hablarte y contarte que este viento es tan fragante como cuando pude contemplar tus ojos y que el cielo se pinta de un azul oscuro peinado de pocas estrellas. Estrellas que no son solamente tuyas y mías. Si al menos estuvieras aquí yo no escribiría tantas boberías y tu, tu escucharías mi silencio como tratando de descifrar que pasa por mi mente, sabiendo que mis pensamientos son solo tuyos.

Es verdad cuantas tonterías escribo con el pulso inquieto, pero dígame usted como le digo a un corazón que late entre sombras que deje de escribir? Si una sombras que hace feliz a mi corazón, una sombra que nunca está ausente, una sombra que me escucha, una sombra que es muy mía y que lleva tu nombre aun cuando te siento distante.
 
 
Día 03

Hoy he quemado a mi corazón con agujetas sostenidas para que sea de una manera fugaz, es protección porque tengo miedo, miedo del miedo, un miedo que salpica mi tímida y alejada alma, en algunos minutos me arriesgare hablarte y no se si tenga el valor de decirte que me siento sola y que por eso busco refugio hasta en las noches, como te hago denotar que estoy bien y que nada pasa por mi angustiosa cercanía que se va sumergiendo en soledad?

Ay! Es cierto vivo pensando en cosas complicadas, olvidando que Dios esta en un margen de distancia y que podría escucharme, aun cuando me ahogue en llanto al fin y al cabo el puede leer mis pensamientos.

Hoy estoy viviendo en inercia.

Día 04

La conversación de esta madrugada ha alejado un poco la fatiga del miedo, solo espero que se siga revolcando en las ruinas de su miserable desdicha.

Esta noche he pedido un deseo, un deseo constante que no marchita su espera, antes mis ojos una fugaz estrella asombrando a mi asombro y deleitando a mis ojos con su pequeña lucecita. Como te he contado he conocido a alguien de parentescos sociables, pero eso no causo tanto interés en mi, solo quería sentirme en compañía de algún extraño esta noche sabiendo que pronto será su partida.

Hemos visto una especie de ovni lejano el cual yo ya había notado sin seguridad, al preguntarle que era? sugirió lo mismo como leyendo mi mente, me impresiono que también creyera en esas cosas, me conto cosas fantásticas, me intereso el tema pero no le di a la larga, yo solo pensaba en sustituir su compañía por la tuya, porque sin duda alguna esa noche era nuestra, aunque su compañía no se me hacia desagradable la tuya habría sido mucho mejor.

A la vanguardia de su extensión semántica llega un mensaje donde dices la pérdida de un familiar, eso decayó un poco en mi lo cual el disimular fue una buena actuación, tú estabas mal y yo estaba ahí tratando de notar estar bien mientras me ahogaba por no poder hacer nada justificando mis abrazos por la desagradable distancia.

Ay! pero el nocivo sufrimiento del enluto es algo que no podemos corregir, lamento tanto ese dolor ajeno y mi falta de compañía.

Día 05

Cursilerías susceptibles embriagadas con agua es lo que suelo escribirte, estoy encariñada a tu presencia oculta y la comprensible angustia. Valdrá la pena escribirte desde este techo de palma? Quisiera aprender a enfocarme menos en las delineadas estrellas y en las en cucharadas remembranza que tiñen de gris por su poco regocijo, te he extrañado y me ha dolido pero prefiero eso que subirle un escalón mas al olvido.

Ay! Hoy solo quiero estar sola y caminar al lado de mi sombra porque he notado cambio estos últimos día y no es solo por mi sucede que ya yo te hago arrinconándome mientras yo hago vagar a mi alma por debajo de mi sombra tratando de cambiarle el lugar para poder desahogarme, porque nos cuesta tanto ser igual que antes? Hemos cambiado, yo lo se y tu lo sabes

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